En un giro que parece sacado de un guión de Hollywood, Alan Andreu, un joven mexicano que alguna vez soñó con brillar en las canchas de la Liga MX con el Atlas, cambió los tacos por las tornamesas y se convirtió en Alure, el DJ que está conquistando el mundo. Este 18 de julio de 2025, Andreu hará historia al presentarse en el escenario Melodía de Tomorrowland, el festival de música electrónica más grande del planeta, en Boom, Bélgica.
“Es un orgullo enorme y la verdad que un sueño hecho realidad. Esta es la primera vez que voy al festival como aficionado y como artista”, confesó en una entrevista exclusiva para CONTRA. Pero, ¿cómo pasó este tapatío de patear balones en la Segunda División a hacer vibrar a miles con sus beats?
De la Academia del Atlas a un callejón sin salida
Alan Andreu creció con un balón en los pies y el escudo rojinegro del Atlas tatuado en el corazón. Formado en las fuerzas básicas del club tapatío, llegó a ser parte del equipo de Segunda División entre 2017 y 2018, a un paso del sueño de debutar en la Primera División. “Estaba lo más cerca que puedes estar antes de llegar a primera”, recuerda en su charla. Pero el fútbol, como la vida, no siempre sigue el guión. Una serie de lesiones recurrentes frenaron su ascenso, dejando al joven de 19 años en un punto de inflexión: “Fue algo muy doloroso, muy difícil, me dejó en un punto donde ya no sabía qué hacer con 19-20 años”.
Las lesiones no solo lo alejaron de las canchas, sino que también lo sumieron en una crisis personal. El fútbol, que había sido su brújula, se desvanecía. Pero en ese momento de oscuridad, Alan encontró una chispa inesperada: la música electrónica. Con el apoyo de sus padres, decidió dar un salto al vacío. En 2019, dejó atrás el sueño futbolístico y se inscribió en un curso de producción musical. “Decidí irme un año a estudiar producción musical”, cuenta. Ese año marcó el nacimiento de Alure, su alter ego artístico, y el comienzo de una travesía que lo llevaría de los campos de entrenamiento a los escenarios más prestigiosos del mundo.
Alure: El DJ que nació de las cenizas
La transición de Alan Andreu a Alure no fue un camino de rosas. La escena de la música electrónica es un terreno feroz, donde “hay competencia hasta debajo de las rocas”, como él mismo admite. Pero su mentalidad de deportista le dio la fuerza para perseverar. Con un estilo que fusiona ritmos vibrantes y melodías envolventes, Alure comenzó a hacerse un nombre en la escena local, tocando en clubes y festivales mexicanos. Su talento lo llevó a firmar con sellos discográficos y a compartir cabina con nombres consagrados, pero el verdadero golpe llegó en 2025: una invitación para tocar en Tomorrowland, el Olimpo de la música electrónica.
El 18 de julio, a las 18:00 horas, Alure subirá al escenario Melodía en Boom, Bélgica, frente a más de 400,000 asistentes de casi 200 nacionalidades. A pesar de un incendio que dañó el escenario principal del festival días antes, su presentación está confirmada, un testimonio de su ascenso meteórico. “No lo veo como algo que, bueno, ya llegué. Voy a usar esa motivación para trabajar aún más fuerte”, asegura. Su agenda no miente: tras Tomorrowland, Alure tiene presentaciones confirmadas en Madrid, el festival Dream Beach en Almería, España, y un merecido descanso en México con su familia.
¿Por qué dejó el fútbol?
El abandono del fútbol no fue una elección, sino una necesidad. Las lesiones, que lo aquejaron durante sus años en el Atlas, no sólo limitaron su físico, sino que también minaron su confianza. “Me dejó en un punto donde ya no sabía qué hacer”, confiesa. A los 19 años, enfrentarse al fin de un sueño que había perseguido desde niño fue devastador. Pero en ese vacío, Andreu encontró una nueva pasión. La música electrónica le ofreció una forma de canalizar su energía y emociones, algo que el fútbol ya no podía darle. “La música llenaba un espacio muy grande en mi interior, me daba tanta alegría que me ayudaba a sentirme mejor en general”, explicó en otra entrevista.
Su paso por el Atlas no fue en vano. La disciplina, el trabajo en equipo y la resiliencia aprendidas en las canchas se trasladaron a su carrera como DJ. Alure no solo crea música; construye experiencias, conectando con el público de una manera que recuerda a un delantero celebrando un gol con la tribuna. Su historia es un recordatorio de que los sueños no mueren, sólo cambian de forma.
Tomorrowland: El escenario donde los sueños se hacen realidad
Tomorrowland, fundado en 2005 por los hermanos Beers, es más que un festival: es una experiencia inmersiva que combina música, arte y tecnología. Con más de 600 DJs en su cartel de 2025, incluyendo leyendas como David Guetta, Martin Garrix y Charlotte de Witte, el evento es el pináculo para cualquier artista electrónico. Para Alure, debutar en este escenario es un hito personal y un orgullo nacional. “Nos vemos en el festival donde los sueños se hacen música”, escribió en sus redes, un eco de la emoción que comparte con otros DJs mexicanos que han pisado Tomorrowland, como Tom & Collins.
A pesar del incendio que afectó el escenario principal, la organización ha garantizado que el festival seguirá adelante con su magia intacta. Alure, con su set cargado de energía, está listo para hacer vibrar a los asistentes, muchos de los cuales, como él, estarán viviendo Tomorrowland por primera vez. Su presentación no solo marca el debut de un nuevo talento, sino también la consolidación de México en la escena electrónica global.
Una lección de reinvención
La historia de Alan Andreu, ahora Alure, es un canto a la resiliencia. De las canchas del Atlas, donde las lesiones cortaron su sueño futbolístico, a los escenarios de Tomorrowland, donde sus beats harán bailar a miles, su trayectoria es una prueba de que los finales dolorosos pueden ser el comienzo de algo extraordinario. “La música es el lenguaje universal”, dice, y con cada drop, Alure demuestra que no hay límites para quienes se atreven a soñar.